Una mente adolescente – Capitulo 1: Lo poco que recuerdo (parte 2)

10 de febrero de 2024

Los días siguientes fueron excelentes, nos vimos casi todos los días, si yo no iba a buscarla era ella la que tocaba mi puerta, no importaba cómo pero ambos sentíamos que no podíamos estar solos o al menos no el uno sin el otro. En fin ahora me doy cuenta que es agradable recordar los mejores momentos.

Recuerdo que dos meses después de lo ya contado, llego un día especial, prefiero no detallar la fecha exacta pero ella cumplía 13, dos días después cumpliríamos 7 meses juntos, quería sorprenderla, quería que este contenta, pero como todos… no sabía cómo hacerlo.

Recuerdo una lista algo extensa donde anote todo lo que podía obsequiarle, la lista se redujo bastante cuando mire en mi billetera, ella siempre fue de buena posición, no quería darle algo que ponga en su habitación y solo sirva para polvearse, quería algo que ella viera siempre, quería algo que ella conserve aun si lo nuestro no hubiera funcionado por cosas del destino.. Realmente quería sorprenderla.. ¿Qué Hacer?…

Inicie a armar mi obsequio con un anillo, no quería que fuera cualquier anillo…… un día caminando y buscando uno agradable me encontré con uno bastante interesante, era delgado y bastante cómodo formado por tres aros pequeños entrelazados uno al otro, “Amistad, Amor y Confianza“, eso escribí en la nota que incluiría mi obsequio, una nota algo extensa donde trataba de decir tanto de cómo me siento y de como quería sentirme después.. Siempre junto a ella.

En un párrafo trate de crear una historia uniendo nuestra relación y ese anillo, en resumen “Amistad, Amor y Confianza“ cada aro siendo uno de estos.

Teniendo todo esto sentía que aun no era suficiente para brindar mi obsequio… quería algo que fuera más allá de un anillo y una nota agradable… quería grabar el sentimiento en algo más preciado… y sucedió… quizá no sea la idea más estupenda, quizá sea algo tonto para mucho.. yo no lo vi así…

Un día antes del gran día, se suponía que nos veríamos, fue la primera y única ves que le mentí… le dije que no podría, que tenía que hacer algo para la escuela y que era importante… un supuesto trabajo en grupo… ese día lo único que vi fueron fotografías de ella conmigo, de ella sola, y de momentos agradables que conseguí de un álbum fotográfico que días antes saque de su habitación y traje a la mía.

Había comprado un cuaderno, en espiral para que no se maltrate el contenido que quería darle. Admito que tengo una buena imaginación y hago cosas agradables cuando me lo propongo… Con una carátula algo especial dibuje su nombre, y en cada letra que lo conformaba un pequeño mensaje que hablaba sobre los dos.

En cada hoja una fotografía y debajo de cada fotografía un mensaje, una frase bonita o un recuerdo en forma de relato, metáforas en versos y demás.. En cada hoja deje un espacio en el que había un recuadro y de cabecera de este su nombre, invitándola a escribir y formar parte de esa historia, quería obsequiarle lo mejor de mí y que plasmara lo mejor de ella correspondiéndome…

Fueron las 6 o 7 horas más largas de mi vida, escribí ciento de cosas, arrugue cientos de notas y papeles pero valía la pena, ella lo valía.

Bloque: suscríbete a boletin

Bloque: sobre el Autor

Bloque: Artículos relacionados: 2 columnas 4 artículos

Bloque: Comentarios